Así canta... Emilio el Moro

Así canta... Emilio el Moro

Editorial Alas
Barcelona
Depósito legal B. 11.990-1963

 

Editorial Alas
Año XI
Fundador
RAMON SALA VERDAGUER
Apartado 707 — Valencia, 234
BARCELONA [7]

ASI CANTA...
N.º 1
Emilio el "Moro"
Artista exclusivo de discos "Montilla"

Foto: ALFREDO, BARCELONA

Depósito legal B. 11.990-1.963

¡ASÍ ES ANDALUCÍA LA BAJA!

Monólogo

Letra: Juan Pérez Sánchez

Perdóneme, señor... ¿es usted inglés... alemán?
¿francés?... ¿ah?, español, bien, ¿y de qué región?...
De donde más brilla el sol.
¿Entonces habrá oído usted hablar de Andalucía la baja?...
de su arte y de su sal,
de los vinos de Jerez y
del Puerto el buen coñac;
la manzanilla de Sanlúcar
y los pinos de Puerto Real;
de las murallas de Cádiz
de San Fernando y su Arenal.
...Y de cante ¿«pá» que vamos a hablar?...
Seguirillas, malagueñas, soleá,
alegrías, bulerías y mirabrá.
Y ese cante de los Puertos
que no se «puén» mejorar,
porque tuvo unos maestros
que quedaron inmortal;
Chacón, Torres y el Mellizo,
y si le sigo contando...
nunca podría acabar.
Porque Dios así lo quiso
a ese rincón superar.
Los turistas y extranjeros
al llegar a ese lugar,
cuando se toman tres copas
ya quieren cantar y bailar,
y hasta se rompen la ropa
porque no pueden lograr
esa gracia que disloca.
Y en la Feria de Sevilla
con tanto garbo y salero,
lo primero que se compran
los turistas es el sombrero.
Ella se pone mantilla,
castañuelas y pañuelos,
y dicen ¡viva Sevilla!
lo mejor del mundo entero.

Y cuando van a los toros
en barrera. ¡Los primeros!
y aplauden con entusiasmo
a los famosos toreros.
Después van a las Casetas
con el rumor bullanguero,
se toman cuatro de vino
y bailan como el primero;
y diciendo ¡Viva España!
yo no vuelvo a mi terreno.
También le hablaré de Huelva
la tierra de los choqueros,
de la Virgen del Rocío
y de sus fieles romeros;
del fandango de Alosno
fuente del fandanguillero.
Y de Córdoba la Sultana
cuna de buenos toreros.
Su mezquita musulmana
y sus vinos montilleros,
y de Málaga la bella
con su barrio Perchelero,
ese boquerón de plata
«cogío» por los coperos.
Y esa gracia del Piyayo
que llegó hasta el extranjero.
Y de Almería ¡allá va!
con su fandango bailable
que también se hizo inmortal,
con sus uvas y naranjas
que al mundo suele exportar.
Y para irse a Jaén
hay que pasar por Graná,
pero hay que detenerse,
y pensar lo que vas a visitar;
porque Graná tiene cosas
de grandeza de verdad.
La Virgen de las Angustias
que no se pueden aguantar,
tó el que va a visitarla
le dan ganas de llorar.
Al fondo vemos la Alhambra,
como un doble Potencial,
diciendo: ¡venid extranjeros!
a mi Casa visitar.
Ya llegamos a Jaén
después de haberlo andao tó;
vemos unas maravillas
y la hermosa Cara de Dios;
que tiene esta gran villa,
con nuestro Padre Jesús
y la Virgen de la Capilla.
De cantaores también lo son.
Pues... mire usted de Linares
voy a contar una actuación:
Hace años un tal Penene
era cantaor flamenco y trovador,
llegó un día un foratero
que era de la misma opinión.
En una juerga que tuvieron
se picaron ellos dos,
como eran Trovadores,
verán lo que se escuchó:
El forastero cantó:
«Mira se he corrido tierras
que he corrido el Garbanzal
Cartagena, Herrería
y no he podido encontrar
un zapato a la medía».
Y el Penene contestó:
«Allá voy que echo humo
apártate no te dé,
multiplico, resto y sumo
y ver preparando el pie,
que te ties que probar uno
de la provincia de Jaén».
Y ya hoy no le cuento más,
hablaremos otro día,
tengo tanto que contar
de esa hermosa Andalucía...

 

MARIA DE LA U

(Parodia de M. de la O)

Parodia original de Emilio el Moro

María de la U
que desgraciaíta tu eres, morena,
por culpa de un zulú.

Te quieres reí,
pero los ojitos los tienes llenos de legañas
y no los puedes abrir.

¡Mardito parné, pues por su curpita
compraste el butano
que te hizo puré!...

¡Castigo de Dios
castigo de Dios,
es esa joroba
que llevas a cuestas
María de la U!...

Estribillo

Para tu cuello, collares
para tus manos caenas
y pá tu cuerpo desgarbao
te voy a arrear cien palos
a ver si te enderezas.

Serás más que reina
me dijo el cipayo
y yo le creí,
mi radio y el loro
daría yo ahora por irme a Madrid.

La vía que le pía,
la vía que me da
que pa eso mi hombre
desea que me tire al tren
pá no verme más.

 

LOS CUATRO MULEROS

Parodia original de Emilio el Moro

Ay, llamarme por soleá
llamarme por soleá
como me llamó mi mare
ay, ay, al mes y medio de casá.

Que no llamarme a mi Cacilda
no me llaméis Cacilda,
llamarme por soleá.

Era dos grandes tapones
los que tapaban sus oídos
era muy larga y morena
la cara como una trompa
y del color de la tierra
que no ha visto el agua clara
desde antes de la guerra.

Caballo peor esquilao
y peor atalajao
ningún andaluz lo ronca. (Lo sueña).

Ni traje peor cortao
que el que lucía la doña,
era de lata el herraje.

Ay de los cuatro burrero
que no eran cuatro mulero
que los dueños de las burras, mamita mía,
era el cuarto y el primero,
el de la burra tolda.

El de la burra tolda
el de la burra tolda, mamita mía,
no llegó al río, no llegó al río, no llegó al río.

Porque estaba lloviendo en el campo,
en el campo está lloviendo
y no tenía paragua
ni había comío.

 

DIMELO, DIMELO

(Parodia de: «Di papá»)

Original de Emilio el Moro

I

Voz de niña

Di mamá, ¿dónde está mi papá?
dímelo, dímelo di mamá
di mamá, ¿viste tú a papá?
dímelo, dímelo, di mamá.

Voz gruesa

Pues, sí, corazón,
sé donde está:
empinando del porrón
con su amigo Nicolás...

Pues, sí, corazón,
yo sí lo vi
en el Monte de Piedad
empeñando hasta el reloj...

II

Voz de niña

Di mamá, ¿si papá ha traído ya el jornal...?
dímelo, dímelo, di mamá
di mamá, ¿viste tú el jornal?
dímelo, dímelo, di mamá.

Voz gruesa

Pues no corazón
no he visto ni un solo real
y mañana pa cenar sólo hay papas y nada más.

Voz de niña

Di mamá, ¿viste tú a papá?
dímelo, dímelo, di mamá.

Voz gruesa

Pues sí, corazón
yo si lo vi abrazando a una mujer
de «esas» que andan por ahí...
Pues sí corazón

sé donde está:
o jugando al subastao
o al julepe ahí en el bar.

Voz de niña

¡Oh, mamá, hoy, por fin conocí
al buen padre que me hará tan feliz!

III

Voz gruesa

Es verdad corazón, sin pensar
te enseñé lo qué es tu papá

Voz de niña

Di mamá, ¿ya podré ver a papá?
Dímelo, dímelo, di mamá...
di mamá, ¿yo a papá le veré?
dímelo, dímelo, di mamá.

Voz gruesa

Que sí, corazón, sí lo verás
cuando venga a casa tu papá
y le «atice» a tu mamá.

Pues sí, corazón,
sí lo verás
cuando se venga a acostar
con la tea y sin un real.

 

SI VAS A CALATAYU

Parodia original de Emilio el Moro

Por ser amiga de mi tío Paco
yo me enteré de lo que ocurrió
en juelga se vio la Dolore
liá como una coliflor
y una coplita que andava en pijama.
pregón de infamia de una mujer.

Y el buen nombre
de aquella maña
maña se dio pa comer.

La Dolores de la copla
me dijo mi padre un día
fue alegre, hijo mío, pero fue buena,
y sin trabajar comía.

Si vas a Calatayú,
si vas a Calatayú
pregunta por la Dolore
que una copla la mató
de vergüenza y sofocone,
ves que te lo digo yo
que soy el hijo de la muerta.

Dicen al mozo de la taberna
cuando en la calle lo ven barrer:
¡Tú sabes su madre quién era? Yo no. Qué tonta
Dolores la del cuplé.

El la quería como a un hermano
mas su cariño extranguló
y no supo limpiar el suelo
porque no tenía mistol.

Coplas que vais dando muerte
con el alma te maldigo,
fuiste dolor de mi madre.
¡Ah! Pero conmigo te equivoca.

Si vas a Calatayú (Bis)
pregunta por la María
que un tendero la mató
de tanto como le debía.

Ves que te lo digo yo
que soy de la raza calé.

 

EL EMIGRANTE

Parodia original Emilio el Moro

Tengo que hacer un cepillo, ¿CON QUE?
con pelo de jabalí
pa que te laves los dientes. ¿CON QUE?
con gaseosa y con flit
sobre tu espalda divina
encima me subiré
pa que cuando esté lloviendo
yo no me moje los pies.

A mi Fátima querida
dentro la chilaba
la llevo metida
aunque soy un amargante
jamón en la vía
podré yo a ti darte.

Yo soy un pobre amargante
y vengo a esta tierra extraña
más despistao que un camello
dentro de una farmacia.

Con mis cuerdas y mi guitarra
y estas ganas de reír
yo me vine pronto a España
y ahora yo vivo en Madrid.

 

TRIGO LIMPIO

Parodia original de Emilio el Moro

Te llamaban la panocha
por tu pelo encarnado,
te llamaban la panocha
pero yo no sé lo que te han echao
que ahora eres una brocha
con cuatro pelos a los lado.

María Manuela. ¿Me escuchas?
Yo de vestidos no entiendo
pero te gusta de vera ese que te has ponido,
tan largo, tan corto, tan estrecho,
que a lo mejor por la calle se te van
a ver las costillas.

Te sienta que eres una calcamanía
pero cámbiate de ropa mujer, si es un momento
mientras me tomo el té que está muy caliente.

Ponte el del cuello cerrao que te está de
maravilla, y que te llega dos cuarta poncima
de la rodilla. Cada vez que te lo pones
te encuentro tan elegante, que me parece que
veo la trompa de un elefante.

El chumbo que tú me distes era gordo y colorao,
me lo comí sin pelarlo y aquí lo tengo atrancao.

Te quiero sucia y pelúa, como yo te conocí,
no tienes que afeitarte, pa nadie más que pa YO.

Ni tú eres una mora moderna ni quiero que lo aparente,
que yo te prefiero antigua y holiendo a perros caliente.

¿Te cambiaste las enaguas. Pues andando
pa el teatro. Ya verás con qué envidia
nos contempla más de nueve.

Y al salir yo te prometo
cantarte con sentimiento
lo mismo que te cantaba, cuando vendías
pimientos.

Ya no se pinta la cara
la mujer que yo quería,
eya ya no se pinta la cara
huele a colonia barata
y se lava con la toalla
una vez a la semana.

 

SERRANAS DE LA CORDERA

Parodia original de Emilio el Moro

Una Cordera
una cordera
una cordera
de tanto ir a la playa
se volvió arena
y con la arena
y con la arena
están haciendo
dos ladrillos
pa una escalera.

VERDIAL

El cante de la cordera
está demasiao extendío
el cante de la cordera
y yo siempre he preferío
los filetes de ternera
que es lo mejor que he comío.

 

EL RELICARIO

Parodia original de Emilio el Moro

En un día de feria
haciendo churro lo conocí
era el torero de los aviso
y a pasar hambre me fui con él,
estuvo diez años sin dar un golpe
y a los catorce lo puede ver.

La plaza estaba de bote en bote,
y él solo en aquel redondel
poniendo anuncio sobre la arena
y disfrazado de licor 43.

Pisa morena, písame un callo
que el grito se oiga
se oiga el grito en Nueva York
con un cachito de esparadrapo
al otro día ya puedes darme
otro pisotón.

Llegó hacer un torero
como Velazque y Gregori Pez,
pero en dos años no vi una gorda
pues pa algodone nunca ahorré.

Al dar un lance salió lanzado,
con la cabeza dio en la paré.

La muletilla se la encontraron
en una aldea de Santander,
de la montera nunca se supo,
creo que la tiene un portugué.

Pisa morena, pisa decarsa
que una alpargata, que una sandalia
te voy a comprar.

Con lo que ahorre
esta temporada
lo pasaremos, lo pasaremos
bastante mal.

 

FANDANGOS

Autor: Emilio «El Moro»

Teniendo aceite de oliva,
¡qué asco me da el de soja!,
es lo mismo que cambiar
jamones por zanahorias
y el oro por alquitrán.

———

Están subiendo los huevos
como si fueran globitos,
ya sólo los ricos nuevos
pueden comer huevos fritos
y papas fritas con huevos.

———

Todo el tío que se casa
sólo por el interés,
pronto será el ordenanza
de su suegra y su mujer,
¡qué poco pinta en su casa!

———

El que deja a su mujer
soga larga y no vigila,
en la frente ha de tener,
por confiado y por lila,
una cosa que yo sé.

———

Cuando te dije te quiero
te pusiste a saltar
cuando te dije te quiero
fueron tan grandes tus saltos
que llegaste a Gibraltar
y te casaste con otro.

 

ANTONIO BRAGA HEREDIA

Parodia original de Emilio el Moro

I

Con un ladrillazo sangrando en la boca
y con su chibata de pino en la mano
a darse un bañito por el río iba
Don Antonio Braga en traje de baño.

Y entre higos y chubo la luna lunera
alumbraba menos que te alumbra un gas
y cuando el gitano a sentarse iba
se llenó de espina la parte de atrás.

Antonio Braga Heredia
flor de la raza calé
tú tienes lleno de espina
un sitio que no se ve.

De Londres hasta Lucena
de Loja a Benameji
las comadres de Sierra Morena
se mueren de asco al verte llegar.

II

Era Antonio Braga Heredia el gitano
el tío más fachoso y el más derrotao
y en todas las tascas de Sierra Morena
to lo que bebía dejaba fiao.

Pero culpita de una mora alemana
de cerveza en Loja dicen que se hartó
cuarenta guantazos nublaron sus vista
y preso en la trena la turca durmió:

Antonio Braga Heredia
flor de la raza calé
te dieron con la chivata
en medio del peroné
en medio del peroné.

De Ceuta hasta Lucena de Larache a Benamejí
la moritas de Chocueslovaquia
se mueren de pena al verte veni.

 

DOROTEA

Esperanza

Parodia original de Emilio «El Moro»

Dorotea, Dorotea,
tú no sabes bailar charlestón;
Dorotea, Dorotea,
tienes cara de perro pachón.

Te conocí en un «kermés» y te emborraché,
y tu padre se enteró...
me fue a buscar y para lavar
la mancha fatal me dio un frasco de «Mistol».

De poco vale que tu padre no quiera
que bebas vino, si eres borracha,
si es que te gusta la priba y no te privas
porque te matas por la vinacha.

Ay qué tufo que das,
Dorotea, al toser,
tu boquita me huele a bodega.

No te puedo tragar,
anda ya y búscate
quien te compre tintorro a granel.

Dorotea, Dorotea,
sólo sabes del frasco chupar...
Dorotea, Dorotea,
te has debido una esponja tragar.

 

MI TORO NEVAO

Parodia original de Emilio «El Moro»

I

Ya está el torito apartao
pa la Feria de Antequera,
en un cajón der pescao.

El asco de la ribera
es mi torito, toro nevao bis

Lo tengo educao,
igual pega coces que tira bocaos,
y tó lo que sabe yo se lo he enseñao:
yo soy el maestro del toro nevao.

Estribillo

Soy el peor ganaero
del campo de La Coruña;
mis toros no tienen cuernos,
que sólo tienen pezuñas.

Y este que tengo trincao
yo quisiera, yo quisiera
que no fuera degollao,
que de un doló se muriera
este torito afeitao.

II

Suspenda usted la corría,
¡por Dios, señor Presidente!,
suspenda usted la corría;
debiera darle vergüenza
de haber traío esa porquería. bis

La gente pedía que al toro
los guardias le quiten la vía,
y el toro en la arena pingaba y mordía,
mandando toreros a la enfermería.

Estribillo

Yo nunca fui ganaero
del campo de Andalucía,
que soy un mal carretero
y la carreta no es mía.

Y este torito nevao
que no ara y que no tira
por un burro lo he cambiao
y me ha buscao la ruina
ese torito afeitao.

 

GUAJIRAS

Parodia original de Emilio el Moro

Yo quisiera si pudiera
encontrar a una mujer
que me diera de comer
me calzara y me vistiera,
y luego después le diera
un coche pa pasear
un potro de buen andar
con una silla sillera,
aunque parezca una mona.

Yo la quisiera encontrar (Bien)

A mi prima le gusta por la mañana
después del café tomao
irse sola a una montaña
acompañada de un soldao
pero yo que la conozco
se cuál es su intención
lo que quiere que le enseñe (Bis)
el muchacho la instrucción (Bien)

DOS ZANAHORIAS

Dos arbolitos

Parodia original de Emilio «El Moro»

Han salido en mi huerta dos zanahorias,
dos zanahorias de color amarillo,
que me las ha pedido mi tío, el de Soria,
para comerlas frías con salomillo.

Yo creo que si se las come, revienta,
y esto sí que es jugarle una doble picia,
porque mis zanahorias amarillentas
seguro estoy que sufren de la «tiricia».

Zanahoria, zanahoria, mi copla escucha,
con cebolletas frescas me gustas tanto,
y aunque tienes la cara tan paliducha,
mira como rendido de hambre te canto.

Mi cotorra y mi loro están tristes
porque me han visto ayer rebuznar,
yo sé bien que no soy un borrico,
pero nadie lo sabe apreciar.

Porque vino a decirme el vecino
que mi suegra se quiere asfixiar,
como no tiene gas en su casa,
el Butano le voy a llevar.

Si le falta con una bombona,
dos docenas la pienso comprar,
yo pretendo que la muy bribona,
por marimandona, que se hinche de gas.

 

CELO DE ESPUMA

Parodia original de Emilio el Moro

Tu cuerpo lleno de pringue
tus pelos como un erizo
a tu lao no hay quien se arrime
porque hueles a chorizo.

Cuando saliste del río
con tu bañador de cebra
lo dejaste to teñío
de una capa negra negra.

Yo te miraba en silencio
separando una por una
las ranas y los lagartos verdes
de verde aceitunas.

Ciego del sol que da mayo
yo saqué el pañuelo mío
pa sacarme cuatro moscas
pa sacarme cuatro moscas
que en mis orejas habían caío.

Yo reía triunfador
porque le escondí el vestío
y la tuve cuatro meses
sambuyéndose en el río
y la tuve cuatro meses
hasta que murió de frío.

 

MI OVEJITA LUCERA

Parodia original de Emilio «El Moro»

I

A mi pobre borrega lucera
de flaca y de vieja ya no puede andar.

Ay mi pobre borrega lucera,
de botes de leche le he puesto un collar.

Yo la llevo amarrá de una cuerda
y pa que no muerda le he puesto un bozal,
y de tanto quitarse las pulgas
ya no tiene dientes, ni lana, ni ná.

Estribillo

Qué miedo cuando bala la ovejita
¡beee! y cuando le contesta el corderito, ¡baaa!
Me dan ganas de darle una patá
cuando empiesa a balar,
y a veces la tengo que soltar,
cuando la sinvergonzona
hace pis y después lo demás,
que me da en la nariz un perfume ideal.

II

Mi ovejita, qué lata, qué lata,
de las cuatro patas la tengo liciá.

Con la mano le digo que venga
y saca la lengua diciéndome va.
Yo la llamo y, como está sorda,
para que me oiga me enredo a pedrá.

Estribillo

Qué pena cuando bala la ovejita
¡beee! y cuando le contesta el corderito, ¡baaa!
Me dan ganas de darle una patá
cuando empieza a balar,
y a veces la tengo que soltar
cuando, muy agachadita,
hace pis y después lo demás,
y de aceitunas me da,
por lo menos, un quintal.

 

ALEGRIAS DEL MISMO CADIZ

Parodia original de Emilio el Moro

La pobresita Torcuata
me dice que está cansá
la pobresita Torcuata
de tanto fregar los suelos
tiene las rodillas chata.

Tengo una novia que es visca
que mira de medio lao,
tengo una novia que es visca
le pido que me de un beso
y se lo da al que tiene al lao.

De la feria de Utrera
el otro día
se escapó un toro bravo
de la corría
como la pobre es visca
vio dos ventanas,
subió a la que no era
y está en la cama,
las campanas de Utrara
ya la han quitao
y a la vaca lechera
se la han colgao.

Te quiero Pepa
te quiero Pepa
yo te quiero Pepa.
Yo quiero Pepa
darte una torta de castilleja.

 

¡AY PEPA MIA!

Recitado

Francisco Almagro Herrera

Emilio Giménez Gallego

Estaba medio baldá
y tenía cada berruga como un melón;
era muy güena y honrá,
pero un día me engañó
y la maté de una aguantá.

Mi Pepa era patizamba
y estiraíta de cuello,
como su mare del alma,
que parecía un camello.

Y como estaba pelona,
con la nariz aplastá,
era totalmente una mona
a mi chilaba agarra.

Yo no sé lo que me dio,
que siendo tan fea y tan puerca
me buscó la perdisión.

¡Qué lástima de mi Pepa,
que sólo duró tres días!,
y al destaparle la cara,
¡hay que ver cómo golía!

Lo mismito que si fuera
la hija de Juan Simón,
la enterraron por la tarde
y hasta el hoyo lo infestó.

Yo que en una mano llevaba una vela
y, en la otra, un salchichón.

Patizamba, Pepa mía,
ya no te tengo a mi vera,
arrugona Pepa mía.

Aunque estabas quince horas
metía en la peluquería,
volvías hecha una mona.

 

FANDANGOS POR SOLEA

Parodia original de Emilio el Moro

En una piedra de mármol
había una mujer muerta
en una piedra de mármol
con la sangre derretía
y el corazón destrosao
las moscas se la comía.

En la puerta de mi casa
dos huerfanitos lloraban
en la puerta de mi casa.

Se nos ha muerto nuestro padre
y ya no podremos comer
huevos fritos con tomate.

Que desgracia fue la mía
el día que te conocí
qué desgracia fue la mía
pa despistarte de mí
te subiste a un tranvía
y todavía te estoy esperando.

El once le dijo al doce
el trece dónde estará,
el once le dijo al doce
pregúntaselo al catorce
que el quince te lo dirá
que el dieciseis lo conoce.

El trece donde estará
el once le dice al doce
el trece donde estará,
pregúntaselo al catorce
que el quince te lo dirá
que el dieciseis lo conoce.

 

MADRINA

Parodia original de Emilio el Moro

Andando por mi dehesa
con cuatro tachuelas
clava en los riñones
un toro de mi divisa
le dió dos leñazos
y pata en los riñones.

Y ordené a mis mayorales
envolverlo en argodón
que cuando se ponga bueno
a éste lo apadrino yo.

Lo puse a pegar carteles
y en un momento
empapeló la fachá
del ayuntamiento.

Padrino
por fuera cara de bueno
por dentro eres
un asesino. Padrino
mi cara es un pie descarso
y no como más que pepino.

No sabes de mi amargura
pues tus promesas fueron de modo
que llevo ya cuatro años
que desde lejos no veo a los toros.

Padrino, padrino sin un puchero
padrino sin un te quiero
la gente no se imagina
que el pobre de este matador
sea ya la muerte canina.

Por culpa de la ceniza
de un cigarro puro
que ardía en barrera
el cuello de la camisa
le ardió y el berrío
se escuchó en Utrera.

Y entre el miedo que tenía
el dolor y la quemazón
como una moto corría
hasta que llegó a Gijón.

De nuevo por las arenas
sin ser torero
y ya no viste de luce
va de bombero.

Padrino, sólo tengo en mi barriga
más que molestias y ruido.

Padrino, de no comer ya me suenan
como loco los dos oidos
de papa yo me comía
una cosecha y un poco más
y de carne qué alegría
cojé una vaca pa merenda
padrino, padrino te metan fuego
no encierra más que veneno
la gente no se imagina
que el pobre de este matador
no coma más que aspirina.

 

A QUIEN LE VENDO LA SUERTE

(Dos iguales)

Parodia original de Emilio «El Moro»

Tiene el color de la jeta,
negro como el regalís,
y lleva en la boca bocera
y en la mano un calcetín.

De un carro de la basura
la sacaron cuando chica,
y hoy tiene ya veinte años
y huele a coles, pescao y lechuga.

Palabras que lleva el rumbo
tan negras como el carbón,
el poso del tío Raimundo
sintió el profundo cante simplón.

A quien le vendo el aceite
del que no sale para otro lado,
pues tengo catorce litros
en mi despensa, bien achantao.

De aceitunas sevillanas,
quién me compra un litro a mí.
El de soja y avellanas
es el que se queda aquí.

Cuatro kilos de trinita
voy poniendo en los lugares
por donde mi suegra pasa,
y hecha polvo de la casa
mañana, mañana sale.

Yendo de chusma en la moto
corriendo a todo correr,
mi novia anoche se ha roto
el hueso del peroné.

Como el golpe le dolía,
a la Casa de Socorro
la llevaron en seguía,
pues le salía sangre del morro.

Quizás una jarra de tinto
mi novia se trasegó,
como es borracha y lechuza,
buena merluza que se pescó.

 

 

Gracias a Vicente Baños Galindo

Un homenaje a Emilio El Moro
donlope@gmail.com
2023-12-29